La gran diversidad de productos y el mundo globalizado en el que vivimos explica en gran parte el fraude alimentario. Ya no hay que negarlo, sino trabajar y aprender acerca de cómo podemos evitarlo.
Hoy comparto un material que plantea un Plan de trabajo con la finalidad de evitar el fraude alimentario. Por supuesto que es un trabajo de largo aliento y ante el cual nunca nos podemos dormir.
Metodología para evitar el fraude alimentario
- Formar un equipo de trabajo específico. Este equipo humano y, con responsables definidos determinará los términos correspondientes. Determinará el alcance y, sobre un diagrama de flujo del proceso, hará la evaluación de riesgos.
- Análisis de vulnerabilidad. Para cada punto crítico definido en el equipo, debe hacerse una evaluación de riesgos. Como consecuencia poder detectar donde tenemos los puntos más vulnerables de nuestro sistema.
Hasta aquí un bosquejo de un plan y sus etapas para ayudarnos en la gran odisea.
A continuación, veamos un ejemplo concreto de como trabajar en nuestra fábrica en esto de detectar un posible fraude alimentario.
Este análisis de vulnerabilidad a su vez se compondrá de diferentes áreas. Por ejemplo, podemos distinguir entre materias primas y el proceso de producción. Para cada una de ellas, iremos desintegrando en subniveles. Por ejemplo, cual es la cadena de suministro para cada materia prima. Construir un historial, revisar si tenemos antecedentes, etc.
- Definir medidas de prevención y mitigación. Otra etapa de la metodología para evitar un fraude alimentario es definir acciones concretas. Un ejemplo puede ser, sacar una muestra de materia prima antes del ingreso a la fábrica y analizar en el laboratorio. O bien evaluar a nuestros proveedores con un sistema sólido y profundo, según el riesgo que nos transfiera.
- Establecer medidas correctivas. Siempre debe disponerse de acciones correctivas frente a cualquier alerta o hecho fraudulento. Tenemos que anticiparnos a los hechos y tener una rápida capacidad de respuesta.
- Validación y verificación del sistema. Debemos poder corroborar que lo que estamos haciendo efectivamente puede prevenir un fraude alimentario.
Qué análisis podemos hacer para garantizar que nuestros productos sean auténticos
Lo primero a saber es cuales son los casos más habituales de fraude alimentario. Eso nos va ayudar a orientar el tipo de controles y análisis que podemos hacer.
Si nuestro sector se encuentra en productos de olivos, como el aceite, pescados o derivados y, aquellos que se describen como “ecológicos” entonces a poner las barbas en remojo.
Algunos de los tipos de análisis concretos que te recomiendo son los siguientes:
- Análisis de composición química. En ciertos casos podemos querer confirmar la presencia de una sustancia que adultere el producto. En otros nos va a interesar detectar el principio activo. También la concentración es un parámetro que podemos determinar a partir de un análisis de este tipo. Naturalmente que las técnicas son muy variadas en función de las características del producto. En cualquier caso, necesitamos el asesoramiento de un químico o técnico afin.
- Análisis cromatográficos. Para los casos que necesitamos detectar o descartar cierto tipo de sustancias (en cantidades pequeñas, ciertos componentes orgánicos, entre otros), la cromatografía puede ser altamente conveniente. También es indicado cuando necesitamos saber la concentración de una sustancia en cantidad de traza.
- Análisis isotópico. A través de la identificación y cuantificación de determinados isótopos estables, este tipo de análisis es muy útil. Especialmente cuando se trata de confirmar o determinar el origen de una materia prima.
- Ensayos cruzados. Una metodología que siempre me gusta plantear es la de hacer análisis cruzados. Si tienes la oportunidad de ensayar una misma muestra en dos laboratorios distintos, por ejemplo, es genial. También ensayar repetibilidad con varios análisis para una misma muestra y reproducibilidad para contrastar operadores y equipos. Recordemos que ser precisos y rigurosos cuando hablamos de números es fundamental.
La lista puede continuar y ser muy variada, pero creo haber cumplido con mostrarte un paneo general.
Ahora te toca a ti!
¿Qué medida preventiva o de mitigación tienes implantada en tu sistema de seguridad alimentaria? Comparte en el club con un comentario.
Las propuestas analíticas que sugieres para verificar el fraude me parecen acertadas, pero antes de eso sugeriría cotejar con la norma de referencia. En segundo lugar existen otros métodos para identificar adulterantes menos costoso.
Gracias Cristian, se deberá analizar el tipo de producto para así determinar el método de identificación. Y siempre escogiendo la opción mas favorable, tanto en resultados como en costo.
Hola, dentro de las medidas de verificación están las sensoriales que para algunos productos son validas, rápidas y económicas.
Para iniciar a hacer el análisis de peligros es muy útil el diagrama de flujo que se tiene para HACCP, porque vemos claramente las etapas por las que pasa el producto y permite evaluar para cada una los peligros de fraude razonablemente esperados.
Gracias Luz por tu comentario. muy acertado.
De inicio se debe buscar una norma técnica del producto a evaluar en la que se hayan establecido los criterios de identidad y requisitos que debe cumplir el producto para poder evaluar los resultados de los análisis. El principio activo aplicaría más para productos farmacéuticos.
Muchas gracias Sara.
Un saludo
La distribución del producto también debería de contemplarse.